Regresión: Recuerdos que duelen

El procedimiento consiste en tener al paciente bajo un estado expandido de conciencia (vigilia) que aumente el grado de receptividad y emotividad, lo que le permitirá al terapeuta acceder al  inconsciente.

Si bien la persona está en un estado alterado de conciencia, sigue pendiente de lo que sucede en el aquí y ahora, permitiendo revivir los síntomas y agotando aquellas emociones que la están perturbando.

“La terapia dura una hora. Se hace que el paciente se siente cómodamente en un sillón para que logre soltar y relajar todo su cuerpo.

Posteriormente se le pide que recuerde ciertos capítulos de su vida y los cuente manteniendo los ojos cerrados”, señala Elías. Si el psicoterapeuta tiene antecedentes de lo que realmente el paciente quiere recordar, entrará a esa etapa y cuestionará a la persona sometida a la regresión hasta lograr lo que se quiere.

Si bien las técnicas de regresión recurren al subconsciente para recuperar distintos recuerdos, no siempre resultan efectivas, pues en algunos casos, el registro mental es confuso. “Por lo general, estos bloqueos de alguna manera determinan las reacciones y conductas en la vida consciente frente a determinadas situaciones”, indica el especialista.

Esta terapia es útil para resolver problemas en personas que muchas veces no encuentran soluciones bajo otras formas más convencionales de terapia. “Gracias a la regresión podemos ingresar al inconsciente para que sea éste quien deje salir lo que más le está molestando y esté más preparado para liberar”.

Se puede inducir a la persona hipnóticamente y abrir posibilidades de llegar hacia el objetivo trazado. “Los especialistas en este tipo de terapias por lo general dejan que sea la propia sabiduría del inconsciente la que guíe el proceso”, afirma Elías.

Relajación

Se induce en el paciente un estado de seminconsciencia a través de la relajación de todo el cuerpo y tratando de que se despeje la mente. Luego, el terapeuta va adentrándose más, a través de preguntas y órdenes, en profundos recuerdos.

Ambiente especial

Es recomendable un ambiente donde prevalezca el silencio y haya muy poca luz, pues los estímulos externos pueden entorpecer la sesión. A veces se utilizan esencias o incienso para favorecer aún más este clima de relajación. El terapeuta suele grabar o anotar lo que va diciendo el paciente.

Principios fundamentales

Si la terapia incluye algunas prácticas místicas, el especialista colocará su dedo en el centro de la frente, entre las cejas, para activar un chakra. Esto permitirá que la energía fluya mejor y la mente pueda así acceder a los recuerdos.// La Razón