Nueve maneras de negociar un contrato como un líder

Hay cosas en la vida que se aprenden del modo difícil. Negociar contratos laborales o de emprendimientos son uno de ellos. Tener una buena actitud es lo más importante que puede traer a la mesa de negociación. Esté seguro de lo que hace, así logrará un mejor acuerdo.

Piense en ello. Cuando se trata de contratos, el poder del positivismo es real. De la misma manera, le ayuda a tener sentido del humor, sobre todo cuando las discusiones se empiecen a poner difíciles. Recuerde que estas son las personas con las que tendrá que trabajar si decide firmar ese contrato que está negociando. Acá algunos consejos:

1

Tome el tiempo necesario En mi experiencia, los contratos que se firman rápido suelen estar mal hechos. A muchas personas no nos gusta negociar y solo queremos terminar con el incómodo proceso. Lo entiendo, pero no se apresure. El producto final será mejor si le dedica tiempo.

2

Recurra a un profesional Puede que usted sepa bien qué es lo que quiere obtener de un contrato en el área de negocios, pero ciertamente no es su fuerte el escribirlo de una manera que proteja todos sus intereses. Su abogado siempre revisa lo que usted va a firmar.

Con seguridad que trata de hacer todo porque le gusta negociar, pero al final del día necesita el consejo de un experto legal.

3

Siempre tenga una lista Ese listado debe contener de forma general las cosas que usted busca obtener. Piense que esta parte de la negociación es como las primeras semanas saliendo con alguien. En este punto, ¡todos deben estar contentos! Asegúrese de respetar lo más que pueda su plan inicial. Si ambas partes no pueden coincidir en una lista de puntos, ¿para qué molestarse en firmar un contrato?. Que va significar una gran apuesta y un gasto importante de energía y recursos.

4

Empiece por lo sencillo Es decir, toda gran empresa debe dar un paso a la vez. Le recomiendo empezar con los puntos más sencillos antes de seguir adelante. Recuerde, la actitud con la que maneje la negociación es crucial.

Quitar pendientes menores elimina presión de ambas partes del contrato para después conversar de los puntos más difíciles. Es muy probable que la conversación sea más abierta porque ambos negociantes se sentirán involucrados.

5

¿Qué es lo que quiere ganar? ¿Qué espera ganar de este contrato? Debe tener una idea concreta. Pregunte a la otra persona toda la información que necesite para tomar una decisión informada.

Es clave que tenga bien claro sus objetivos, nada debe quedar en suposiciones, sino que se debe registrar en el acuerdo para evitar futuros problemas.

6

No tema hablar y opinar La comunicación por correo electrónico se puede prestar a confusiones. Si esto sucede, ¡llame a la otra persona! No espere a que se desarrolle un mal entendido en toda forma.

Conocer las verdaderas intenciones de su interlocutor le ayudará a dar pasos para atrás y a avanzar cuando sea necesario. Es una buena estrategia para tener un panorama más claro. No se olvide que en una negociación lo que se busca es tener el control del entorno.

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Hay tiempo para cambiar La versión final del documento será muy diferente. No se asuste y recuerde que antes de firmar, todo es negociable. Si no entiende algún apartado, puede pedir que se lo aclaren. Si no está de acuerdo con un punto, vuélvalo a discutir. Si la otra parte de la negociación lo permite, pídale a su abogado que escriba el texto de forma adecuada.

Es preferible perder un poco más de tiempo que firmar todo y luego descubrir que hay puntos que no son de su agrado y que no forman parte de su objetivo. Ya en esta etapa es más difícil dar marcha atrás y volver a comenzar. Aunque si las fallas son estructurales no queda otra que empezar de cero.

8

Es vital un policía malo Algunas personas no se sienten cómodas diciendo lo que quieren de manera directa. Para eso puede ser muy útil tener un compañero de negociación. Por ejemplo, en mi caso, mi esposa es mi socia y consulto con ella antes de decidirme por algo. Las personas con las que firmo contratos lo saben. Muchas compañías tienen empleados que se presentan como negociadores difíciles o ‘policías malos’ por esta misma razón.

9

No deje de ser razonable Es en serio. Para saber qué es lo que puede pedir realmente debe investigar. Hable con expertos de su industria y escuche lo que le puedan decir.

No olvide cuáles son sus metas y qué quiere lograr con la próxima relación de negocios. Piense en qué puede mejorar o cambiar.

Sin embargo, si alguien trata de presionarlo para firmar un contrato, frene y estudie sus razones. No olvide pla near una estrategia cuidadosa que sea flexible a las modificaciones// El Deber.com.bo